CRISTO HACE TRES PROMESAS SIGNIFICATIVAS

Texto.  Juan 14:18-19
"No os dejaré huérfanos, volveré a vosotros.
Dentro de poco, el mundo no me verá más, pero vosotros me veréis. Y porque yo vivo, vosotros también viviréis".

I. Tres Paradojas Muy Significativas

A. Qué es una paradoja?  Definición

1. Especie extraña o contraria a la opinión común.
2. Aserción inverosímil o absurda, que parece verdadera.
3. Hecho que aparentemente está en contradicción con las leyes de la naturaleza o con ciertos principios demostrados.  (Diccionario Ilustrado Sopena, pág. 3161).

B. La Vida de Jesús Llena de Paradojas

1. Fue el que creó los animales, sin embargo le tocó pedir prestado un pollino. Mateo 21:1-7
2. Es dueño de todo el universo, sin embargo, en este mundo no tuvo "donde recostar su cabeza". Mateo 8:18-20.
3. Es el Rey de Reyes y Señor de Señores; sin embargo "tomó naturaleza de siervo". Fil.2:7

C. Jesús se refirió a tres paradojas

1. Jesús ya había declarado su propósito de dejar a sus apóstoles y amigos y de volver al Padre; pero con la misma seguridad dice: "no os dejaré huérfanos: vendré a vosotros".
2. Ya había dicho que sería ocultado de ellos, sin embargo más tarde les promete: "vosotros me veréis".
3. Jesús había aseverado que su muerte sería según el método cruel romano de la cruz; sin embargo, les dice a sus discípulos, "porque yo vivo, y vosotros también viviréis".

• Ausente, y sin embargo presente.
• Oculto, y no obstante visible..
• Muerto, y a pesar de esto vivo.

II. Estas paradojas son a la vez tres importantes promesas.

A. La promesa del Pronto Regreso de Jesús.

1. "No os dejaré huérfanos vendré a vosotros". Ver. 18
2. Cristo está siempre presente, sin embargo viene pronto por nosotros.
3. Vendrá de nuevo para tomar a los suyos y para juzgar al mundo; pero viene en las horas tristes y sombrías para que no estemos huérfanos.
4. Cristo viene también cuando la tempestad ruge y el agua de la amargura se mete en la barca de nuestra vida.
5. Cristo no nos ha dejado "huérfanos" porque todo el tiempo ha estado y estará guiando nuestra vida a través del tormentoso mar y no descansará hasta llevarnos a su hogar eterno".
6. Cristo no nos deja "huérfanos" pues viene a nosotros cuando los amigos y los compañeros nos dejan solos.
7. Cristo viene a nosotros cuando la noche se torna negra y tenebrosa. Él está ahí para iluminar nuestro sendero.
8. Cristo viene a nosotros cuando nuestros amados tengan que ir a "dormir". Se nos dará la grata noticia: "El maestro está aquí". (Juan 11:28). "No os dejaré huérfanos". Por tanto, "no llores".
9. Cristo vendrá a nosotros cuando se aproxime el momento de cruzar el valle de la muerte y nos asegurará "el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá". Juan 11:25

B. La promesa de la constante presencia de Jesús

1. "El mundo no me verá más, pero vosotros me veréis". vers. 19
2. Sólo el corazón humilde que recibe la luz del cielo podrá entender y percibir la presencia de Cristo.
3. La jactancia y la sabiduría del mundo jamás entenderá las cosas del Espíritu y menos comprender la presencia de JEsús en la vida diaria de sus hijos.
4. Sólo el pecador arrepentido que acepta el perdón que Cristo le ofrece y que experimenta la conversión espiritual puede discernir la presencia de Jesús en su vida, y llega a entender las cosas espirituales.
5. La visión de la presencia permanente de Jesús, es lo que ha sostenido a través de las edades a sus hijos, aún en medio del sufrimiento.  "Veo los cielos abiertos y al Hijo del Hombre de pie a la diestra de Dios". (Hechos 7:56). Dijo el primer mártir, Esteban.
6. "Y yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo". Mateo 28:20.  En esta segura promesa radica nuestro poder y nuestro consuelo.
7. No es que tengamos fuerzas por nosotros mismos.  Es la promesa de Jesús la que nos da fuerza, la que nos dice: "Yo estoy con vosotros todos los días".
8. No es que tengamos fuerzas por nosotros mismos.  Es la promesa de Jesús la que nos da fuerza, la que nos dice: "Yo estoy con vosotros todos los días".
9. Todos los días nos ayudará a cumplir nuestros deberes, nos guiará, nos consolará, nos santificará y nos sostendrá.

"Venid diariamente a Jesús, quien os ama.  Abridle vuestro corazón. No hay desilusiones en Él. Nunca encontraréis otro consejero mejor, y un guía más seguro o una defensa más tierna.  En medio de todas vuestras tribulaciones.. habéis tenido un amigo que nunca falla". (Dios nos cuida, 18 de Enero).

C. La Promesa de la eternidad con Cristo

1. "Porque yo vivo, vosotros también viviréis. Vivimos por su vida. Nuestra vida es tan dependiente de Cristo como la de un niño de su madre.
2. No tenemos ninguna vida independiente, derivada de nosotros mismos, o sostenida por nosotros. "Porque en Él vivimos, y nos movemos, y existimos". Hechos 17:28.
3. "Porque separados de mí, nada podéis hacer".  Separados de Cristo nos marchitamos como las flores.
4. Vivimos en la vida de Cristo.  Para nosotros el vivir es Cristo, ahora y en el futuro.
5. Vivimos porque Cristo vive en nosotros.  En el momento que lo aceptamos viene para morar en nosotros.
6. "El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios, no tiene la vida". 1 Juan 5:12. Nuestro aliento, el latido de nuestro corazón es la evidencia del poder de Dios sosteniéndonos y dándonos vida permanentemente.

III.  Invitación Final

1. Descansemos en la promesa de la eternidad con Cristo.
2. Fortalezcamonos en la continua presencia de Jesús guiando nuestras vidas.
3. Preparémonos para la pronta venida de Jesús.
4. ¿Cuántos quieren en este momento abrir su corazón a Jesús para que viva en él, asegurar su constante presencia y estar con Él en su venida?.
5. ¿Quieren estar listos para la venida de Cristo en Gloria e ir a vivir con Él por la eternidad?.

(Tomado de:  IASD. Ministerio Juvenil. Unión Colombiana. Jóvenes predicando con el espíritu y el poder de Elías. Tema 2)